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Archivo de la etiqueta: poesía

Las direcciones contrarias

No es de la salvación
de lo que hablo, es
de lo que no se salva
y queda siempre
con el arpón clavado,
y tenso en la soga
que lo arrastra hacia arriba,
va al fondo igual,
Moby Dick en la propia calavera.
Y por eso, si el alma o la ballena
lo que se hunde
lo mismo da: la vuelta es por el fondo.

Quiero decir, parece
una insistencia de las cosas
–y de los seres–
que la gracia
venga a aliviarles el desastre
cuando ya iban a darse
por vencidos. Si no
cómo se explica
que suba así de dulce la mañana
y que uno sienta
abrirse todavía el corazón
al toque blando de la luz
cuando un instante atrás apenas
estaba todo
tan oscuro.

Sonia Scarabelli

¡Asombrosos viajeros! ¡Qué nobles historias
Leemos en su ojos profundos como mares!
Muéstrennos los estuches de sus recuerdos,
Esas joyas maravillosas, hechas de éter y de astros.

¡Queremos viajar sin vapor y sin velas!
Para ahuyentar el tedio de nuestras prisiones,
Traigan a nuestros espíritus, tensos como un una tela,
sus recuerdos con marcos de horizontes.

Digan, ¿qué vieron?

Charles Baudelaire, en Las flores del mal

al mate

de consuelo a punto 

calabaza 

mi rincón centrado en tu fogón amigo 

otra vez conmigo 

y vos… conmigo.

armazón apurado a la mañana 

sorbo sorbo 

despierto contra el frío 

centinela desvelado entre los libros

rito de la yerba agua espuma 

en el redondo hueco de las manos 

voy siempre con vos 

pequeño hermano

Liliana Ancalao

¿Quién creó el mundo?
¿Quién dio forma al cisne, al oso negro?
¿Quién hizo al saltamontes?
Me refiero a este saltamontes,
el que acaba de saltar en la hierba,
el que ahora come azúcar de mi mano,
el que mueve las fauces de atrás para adelante y no de arriba abajo,
el que mira a su alrededor con enormes ojos complicados.
Ahora levanta una de sus patas y se lava la cara cuidadosamente.
Ahora de pronto abre sus alas y se va flotando.
Yo no sé con certeza lo que es una oración.
Sin embargo sé prestar atención
y sé cómo caer sobre la hierba,
cómo arrodillarme en la hierba,
cómo ser bendita y perezosa,
cómo andar por el campo,
que es lo que llevo haciendo todo el día.
Dime, ¿qué más debería haber hecho?
¿No es verdad que todo al final se muere, y tan pronto?
Dime, ¿qué planeas hacer con tu preciosa, salvaje, única, vida?

Mary Oliver

RITUAL

A mi hermano

En nuestra infancia

comer era

un acto enorme, un acto

de predestinación

Sobre el mantel de los almuerzos

familiares volaba 

la anécdota de mi madre, 

once hermanos 

y un perro propio 

llamado «Sisobra»,

y la risa y comer 

marcaban al futuro 

una guía en brazos abierta,

 como aquella planta

que se nombra «lazo de amor»

y arroja los retoños 

en verdes ramilletes 

sobre tallos pelados,

Cosas hay que son 

la luz de una casa, 

la forma insistente, 

torva a veces,

del único lugar

donde se estuvo, 

donde se ha crecido.

Siempre marcados 

por una carencia y vivos 

por actos minúsculos 

como alcanzar el pan o el plato, 

mis hermanos y yo conversamos 

sentados a la mesa,

y en esta falta 

que nos completa 

y pone tres a conversar, 

enteros somos, 

fugazmente,

como si dijéramos 

ante lo que no fuimos,

¿qué otro mejor que éste, 

nuestro secreto yantar,

nuestro alimento?

Sonia Scarabelli

Oh partícula de polvo de tus pies de loto
Oh ciudad de la isla del sol
Oh cascada de ghee
Oh arco de flores
Oh cuerda de abejas
Oh hija de la montaña nevada
Oh brote del árbol de coral
Oh collar de piedras de los deseos
Oh bosque de los deseos
Oh refugio del mundo
Oh loto de miles de pétalos
Oh flor de loto azul
Oh luna de almizcle
Oh gota líquida de piedra lunar
Oh el mundo bebiendo luz de luna
Una cascada de néctar cae de las flores de la mente

Oh tímidos ojos como un ciervo del bosque
Oh cuerpo fino como un rayo
Oh mecha bermellón de tus cabellos
Oh rizos hermosos como abejas jóvenes
Oh cabello suelto y disperso
Oh frente como una segunda media luna
Oh cejas ligeramente arqueadas
Oh tus ojos como abejas
(El día amanece en tu ojo derecho
La noche cae en tu ojo izquierdo
y tu tercer ojo es el crepúsculo)
Oh pestañas de plumas que perturban la tranquilidad
El mundo se crea cuando abres tus ojos
y se disuelve cuando los cierras

Oh los tres pliegues de tu cuello
Oh tus cuatro brazos suaves y esbeltos como el filamento de un loto
Oh el encanto de tus manos
Oh tu pecho el néctar de una jarra de rubí
Oh las ropas deslizándose en tus senos
Oh las curvas húmedas de tus senos
Oh la laguna profunda de tu ombligo
Oh la línea de vello en tu vientre una onda en el río
Oh tus muslos como tallos de plátano dorado
Oh tus rodillas redondeadas
Oh la delicadeza de tus tobilleras
Oh las corrientes de néctar que fluyen entre tus pies
Oh tus pies de loto tendidos sobre mi cabeza

El sol de la mañana abre racimos de loto en la mente de los grandes poetas
brillantes como finas piedras lunares dulces como leche y ghee
dulces como el aliento de loto de la Reina de la Palabra
y tus pendientes tintinean ligeramente mientras escuchas y asientes
tus pendientes brillantes siguiendo el compás con asombro y deleite
son pequeñas lunas que reflejan la luz de tus mejillas

Eres mente eres espacio eres el viento y el fuego que el viento lleva
Eres las aguas y la tierra no hay nada más
Este mundo sin luz está inundado con tu esplendor


FROM A HYMN TO THE GODDESS OF THE THREE CITIES
O speck of dust from your lotus feet
O island city of the sun
O waterfall of ghee
O bow made of flowers
O bowstring of bees
O daughter of snow mountain
O coral-tree blossom
O necklace of wishing-jewels
O forest of wishing-trees
O refuge from the world
O lotus of a thousand petals
O full-blown blue lotus
O moon of musk
O liquid drop from a moonstone
O world drinking moonlight
A waterfall of nectar falls from the flowers of the mind

O eyes as shy as a forest deer
O body slender as a lightning bolt
O streak of vermillion in the part of your hair
O curling hair beautiful as young bees
O hair untied and flowing
O forehead like a second half-moon
O eyebrows slightly arched
O eyes like bees
(Day dawns in your right eye
Night falls in your left
and your third eye is the twilight)
O feathery eyelashes disrupting tranquility
The world is created when you open your eyes
and dissolves when you close them

O the three creases in your neck
O your four arms soft and slender as the filament of a lotus
O the loveliness of your hands
O your breasts like ruby jars of nectar
O the clothes slipping from your breasts
O the sweating curves of your breasts
O the deep pool of your navel
O the line of abdominal hair like a ripple on a river
O your thighs like golden plantain stalks
O your well-rounded knees
O the soft jangle of your anklets
O the streams of nectar flowing between your feet
O your lotus feet set upon my head

The morning sun opens lotus clusters in the minds of great poets
bright as moonstone slivers sweet as milk and ghee sweet
as the lotus fragrance of the mouth of the Queen of Speech
and your earrings slightly jangle as you listen and nod your head
keeping time in wonder and delight your shining earrings
like little moons reflecting the brightness of your cheeks

You are mind you are space you are the wind and the fire the wind carries
You are the waters and the earth there is nothing more
This lightless world is flooded with your radiance

Eliot Weinberger (traducción de Luna Marina Companioni, en revista Erial)

Yo tenía ganas de hacer como los dos hombres que

vi sentados en la tierra cepillando hueso. Al principio creí

que aquellos hombres no estaban bien. Porque se la pasaban

sentados en el suelo todo el día cepillando hueso. Después

aprendí que aquellos hombres eran arqueólogos. Y que

hacían el servicio de cepillar hueso por amor. Y que

querían encontrar en los huesos vestigios de antiguas

civilizaciones que estarían enterradas por siglos

en aquel suelo. Entonces pensé en cepillar palabras. Porque

había leído en algún lugar que las palabras eran

caparazones de clamores antiguos. Yo quería ir detrás de los

clamores antiguos que estaban guardados dentro de las

palabras. Yo sabía también que las palabras poseen

en su cuerpo muchas oralidades remontadas y muchas

significancias remontadas. Quería pues cepillar las

palabras para escuchar la primera mueca de cada una,

Para escuchar los primeros sonidos, aunque todavía

bígrafos. Empecé a hacer eso sentado en mi

escritorio. Pasaba horas enteras, días enteros

dentro de mi cuarto, encerrado, cepillando palabras.

Entonces mis amigos preguntaron, ¿qué hacía todo el día

encerrado en aquel cuarto? Les respondí, medio

entresoñado, que estaba cepillando palabras.

Les pareció que yo no estaba bien. Entonces tiré

el cepillo afuera.

Manoel de Barros, Memorias inventadas

me han pedido que hable de belleza
y la belleza es una flor que crece en cualquier parte
la riegan con cinismo en los salones
la pisan la orinan la escupen los gorilas
con su baba verde agua
la besan con aliento jediondo los borrachos
igual ella crece en lo baldío
me han pedido que hable de belleza
y la belleza es una flor que crece en cualquier parte
la policía tortura pibes pobres caídos en la sombra
portadores de rostro / sospechoso lo morocho

son los pibes del fondo de mi calle
flores negras del barro sublevado
// iván eladio torres desaparecido en la seccional primera de comodoro medarrabia
// eduardo mariano haro castrado en la seccional segunda de la loma petrolera
// juan josé gramajo david hayes julián antillanca el pibe almonacid
la lista de torturados golpeados agujereados en el cuerpo
por el gatillo fácil de la gorra se me hace interminable
dónde está luciano gonzález desaparecido por el geop en corcovado?
me han pedido que hable de belleza
y la belleza es una flor que crece en cualquier parte
siembran terror
allanan los jardines y las casas que ayer olían a pan y cordillera
ahora huelen a miedo y a silencio en los perfectos expedientes
yo conozco una azucena morena que se llama maría millacura
promueve marchas callejeras por iván eladio

maría millacura girasola en los pasillos de los tribunales
en toda oficina donde pone sus huevos la gallina del olvido
baila cuecas negras delante de la seccional primera de policía
inunda paredones con la foto de su iván eladio
la belleza es una flor que crece en cualquier parte
yo conozco a césar antillanca el padre de julián
transformó la pena en dignidad
escribió su nombre en las paredes y en los labios
llevó a juicio a los culpables
y la justicia los dejó libres
les dio credencial para matar
la escupen la mean la muerden los perros de la brigada canina
la pisaron los de la brigada motorizada
incendian barrios de los sin tierra
pisotearon niños yo los vi no me contaron
la policía montada entró en los ranchos
del barrio dignidad señor matanza
el intendente de trelew

ordenó desalojo sin orden judicial
y adónde estaba la justicia
el viernes 28 de agosto de 2009
yo daba mis clases de belleza
en la escuela de las mil viviendas
cuando el aire comenzó a oler a pólvora
gases lacrimógenos subían como lluvia ácida por el barrio dignidad
bajaban corriendo las mujeres tropezaban con hijos abrazados
caían entre patas de caballos
revolcadas polleras rodaban
dejaban sus flores estampadas en el piso
mientras las topadoras hacían su trabajo
cada rancho era una flor
cada tirante quebrado a patadas
cada chapa guardaba un sueño de hogar en la llanura
cada puerta era una promesa navegando
hacia dentro de los ojos
ahora humareda y tablones incendiados
ahora jarros y ollas rodando entre las matas
objetos extraños vagando en lo desierto
flores silvestres aplastadas por la motoniveladora

y el eco del llanto y ese humo en la mañana
creciendo como una flor venenosa pegada en las ventanas
mientras hablábamos en la clase de cultura
y estética contemporánea
me han pedido que hable de belleza
y la belleza es una flor que crece en cualquier parte
la riegan con usura en los salones
cacarean las gallinas tribunales
y muerden sus pétalos más frágiles
la escupen la mean
la besan con aliento jediondo los borrachos
igual la piropean
los viejos de arriba del andamio
la pisan la orinan la escupen los gorilas
con su baba tóxica verde agua
igual ella crece en lo baldío
la parcelan la vigilan
la patean en la cana
la desalojan la erradican

la muelen la prenden fuego la hacen humo
igual ella crece en lo baldío
maría millacura girasola en su nguillato
frente a la seccional primera de policía
con la foto de iván eladio canta maría millacura
por la sonrisa de julián
pinta muros habla en las escuelas
césar antillanca
conversa en cada sitio
en toda oficina donde pone sus huevos la gallina del olvido
me han pedido que hable de belleza
y la belleza es una flor que crece en cualquier parte